"Vida a las siete menos diez"

Hola tragador@s!!!, Al fin viernes, muy contentas por la victoria de Uruguay, ese equipo que nos tiene comiendonos las uñas hasta el final y que nos llena de orgullo siempre aunque no se gane.
La entrada de hoy se trata de un cuento corto que escribí en una clase de Literatura, fue resultado de la elegía que estamos leyendo en clase, como ya les adelanto es una tragedia, espero les guste y me cuenten lo que les pareció.
Aquí se las dejo...

Eran las siete menos diez, el sol ya descansaba y las primeras estrellas comenzaban a asomarse; Había sido una buena jornada de trabajo , Emily le había dicho que la posibilidad de un ascenso era probable, cuestión rara que lo ayudaría a pagar sus cuentas pendientes y comprar, comprar un collar para el perro. Tenía tantas cosas en mente... que llegar a casa y estar a salvo, que llamar a su padre, que cocinarse ; sí, la vida de soltería era complicada, pero era lo que había elegido, durante años aprendió a valerse por sí solo, lo ponía contento saber que al llegar a su casa tendría a su perro esperándolo, y su televisor, su televisor que había heredado de su abuelo, también estarían sus libros, los comunicadores con el mundo exterior que le permitian ser el hombre conocedor del mundo aunque aveces lo deprimía pensar en eso.
El sonido de ómnibus frenando lo trajo a la realidad otra vez, era su parada ; Hacía frío, su tapado gris no le era suficiente en esos tiempos, se dispuso a caminar, debía reconocer que el maletín con los billetes le molestaba, todos los díasde su vida tenía que llevarlo y traerlo de vuelta, como si fuera un amigo, pero solo era un pedazo de cuero de un pobre animal con asas, que sin él no tendría trabajo.
Ya había recorrido la mitad de la cuadra, los árboles creaban formas que lo estremecían, parecía que las personas se hubiesen escondido en sus hogares resguardándose de los efectos de la civilización.
De pronto sintió una especie de presión en su cabeza, al darse vuelta, un hombre de pelo largo lo tenía agrarrado, sintió el sudor frío que le recorría la espalda, no podía reaccionar, -Dame el maletín- dijo el hombre sin piedad - voy a tener que matarte-. Miró el maletín que sostenía todavía en la mano, miró al hombre, y su arma ; en ese momento vió pasar toda su vida en un instante, los momentos más lindos habían sido los más cortos, igual valiosos, también recordó os errores, su carrera de abogado abandonada, la mujer del corazón roto, tal vez le serviría que le dispararan para no tener que volver a errar, pero no tendría la posibilidad  de repararlos; Deidió entregarle el maletín y dejar que el tiempo que parecía infinito pasara. El hombre de pelo largo le arrebató el maletín y salió corriendo.
Ya sintiendose a salvo, caminó sollozando silenciosamente, un dolor en la espalda lo hizo vacilar pero al fin darse vuelta, el arma lo estaba apuntando aún y también los ojos del hombre de pelo largo que la sostenía. En vez de enloquecer, se tranquilizó y pensó en que su día había sido diferente, no sintió nada ; Capaz ese era su destino, el hombre que se iba con su maletín se quedaría con sabores agrios, por herir a alguien y por llevarse el contenido del maletín , el cual era dinero falso; Así era, en eso trabajaba, se encargaba de llevar a casa dinero que descartaba el banco y quemarlo, se encargaba de las sobras del banco.
De pronto tendido en el suelo se llenó de horror al pensar en su perro, estaría solo, se sentía mareado, su mente quedó en blanco, no podía pensar en nada más, decidió al fin cerrar los ojos.
Así era la vida, nunca esperamos nada hasta que nos sucede, siempre nos encontramos aparte del mundo hasta que un hecho nos vuelve a introducir en él. La línea de la vida se había herido.
Cuando abrió un ojo, se dió cuenta que todavía respiraba o algo parecido a eso, el médico le había dicho que debería pasar  su vida en silla de ruedas, no importaba, seguiría, tenía la posibilidad de volver a empezar, empezar otra vida diferente a la de las siete menos diez.

Nos leemos pronto!!! :)